"LA IMPORTANCIA DEL DESCANSO”

Vivimos en un mundo en el que el trabajo, las deudas, responsabilidades financieras, buscar una mejor calidad de vida para nosotros y nuestros seres queridos nos absorben tanto, que nos olvidamos de nosotros mismos.

Olvidamos que Jesús nos enseño a amarnos para poder amar a los demás.

Eclesiastés 4:6
Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu.

El trabajo es parte necesaria de nuestra vida, pero como nos dice el hombre más sabio que ha existido, Salomón hijo de David, no debemos permitir que se convierta en lo principal para nosotros.

Es necesario que también descansemos después de las tareas, oficios y trabajos diarios; cuidar de nuestra salud, alimentación y descanso.

Que agradezcamos por la bendición del trabajo que tenemos y mediante el cual Dios cubre nuestras necesidades:
Tú lo has visto; porque miras el trabajo y la vejación, para dar la recompensa con tu mano;A ti se acoge el desvalido;Tú eres el amparo del huérfano.
Salmos 10:14

A veces pasamos por pruebas económicas, de salud o familiares que dependen de nuestro trabajo y sentimos que nos ahogan, llenan nuestra mente de miedos, desesperación, angustia y noches sin dormir.
Por todo esto nos olvidamos de algo que es de suma importancia, amárnos a nosotros mismos; cuidar del templo del Espíritu Santo, que es nuestro cuerpo.

Como cristianos, como hijos de Dios, debemos aprender a confiar en Él, dando testimonio de nuestra fe, la cual se fortalece en cada prueba.

Entregar cada situación en las manos de nuestro Padre Celestial, recordando siempre el infinito amor que nos tiene y que Dios prometió que todas las cosas nos ayudan a bien si nuestra confianza está totalmente puesta en nuestro Creador.