lunes, 11 de julio de 2016

"JESÚS, NUESTRO ABOGADO"

1.Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
2.Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.
1 Juan 2:1-2

Jesús al padecer y morir en la Cruz por nuestros pecados y para nuestra salvación, estableció una manera de comunicación con Dios, porque sólo a través de Él que puede interceder por nosotros para el perdón de nuestros pecados.
Cuando cometemos pecado, el Espíritu Santo se entristece en nuestro corazón y nos redargulle para arrepentimiento, el cual debe ser sincero y real.
Jesús en su infinito amor intercede por nosotros ante el PADRE para perdón de nuestras ofensas:
Porque seré propicio a sus injusticias, Y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades.
Hebreos 8:12

Pero Dios conoce nuestro corazón y pensamientos, debemos pedir perdón con todo signo de arrepentimiento y la intención de no volver a cometerlo, recordando que aunque sabemos de la misericordia de Dios al perdonar nuestras iniquidades, también el pecado trae consecuencias en nuestra vida que pueden traernos muchos sufrimientos y problemas que pueden desviarnos del propósito que Dios tiene para nosotros y peor alejarnos de Su presencia que trae consigo paz, gracia, amor infinito y bendiciones que inunden nuestra vida de gozo y fe.

Con sincero arrepentimiento de nuestros pecados, en oración, con fe y por medio de Nuestro Señor Jesucristo, pidamos perdón a Dios, nuestro Padre Celestial que nos ama tanto.
Porque un momento será su ira,Pero su favor dura toda la vida.Por la noche durará el lloro,Y a la mañana vendrá la alegría.
Salmos 30:
5

No hay comentarios.:

Publicar un comentario